Edmondo de Amicis was an Italian novelist, journalist, poet and short-story writer. His best-known book is the children's novel Heart.
“!Cómo se olvidan en esos momentos los sinsabores pasados!”
“! Adiós! !Adiós para siempre, mi buena amiga, dulce y triste recuerdo de mi infancia!”
“!Que día más delicioso pasamos!”
“-¿Qué dice usted?- se apresuró a decir Derossi-.Para mí Garrone será siempre Garrone; Precossi, siempre Precossi, y los demás lo mismo, aunque llegase a emperador de Rusia. Donde estén ellos iré yo.”
“-No te reprendo, hijo mío. No te duermes por pereza, sino por cansancio.”
“En los campos de batalla, un rayo; en los sentimientos, un niño; en los sufrimientos, un santo.”
“Tengo valor para morir, pero no para sufrir en vano.”
“Pero no hay alegría duradera ante ciertos aspectos siniestros de la naturaleza.”
“El viaje se hacía interminable: mar y cielo, cielo y mar, hoy como ayer y mañana como hoy, siempre, eternamente.”
“-No olvides este momento-añadió mi padre-, porque de los millares de manos que estreches en tu vida, tal vez no haya ni diez que valgan como la suya.”
“Eso es valor, Enrique, el valor del corazón que no razona ni vacila, y va derecho con los ojos cerrados a donde oye el grito de quien se muere.”
“No he de adornar con palabras superfluas una grandeza tan manifiesta.”
“Señores, bello y admirable es el heroísmo de un hombre; pero el de un niño sin miras de ambición o de interés alguno, que debe tener tanto más atrevimiento cuanto menores son sus fuerzas; el de un niño al que nada le exigimos y que a nada está obligado, pareciéndonos un ser amable y noble, no ya cuando cumple sus pequeños deberes, sino cuando se percata del sacrificio ajeno, el heroísmo de un niño, digo, raya en lo divino.”
“!Oh, amigo, escúchame! La muerte no existe , no es nada. Ni si quiera se puede comprender. La vida es la vida, y sigue la ley de la vida: el progreso. Tenías ayer una madre en la tierra; hoy tienes un ángel en otra parte. Todo lo que es bueno sobrevive, con mayor potencia, a la vida terrena. Por consiguiente, también el amor de tu madre.”
“¿Por qué, Enrique, no les volverás a ver? Esto depende de ti.”
“Y precisamente entonces le hizo usted un ademan con una mano, poniéndose la otra sobre el pecho, como diciéndole: "Confíe en mí”
“No soy digno de besarte las manos”
“Pero pensaba en lo que me aconsejaba mi padre:"Si te ofenden,defiéndete; pero sin llegar nunca a pelearte".”
“Me acordé del consejo de mi padre:"¿Has obrado mal? Pues pide perdón”
“Recuérdalo, Enrique: cuando encuentres a un anciano, a una mujer con su criatura en brazos, a uno que anda con muletas,a un hombre con su carga a cuestas, a una familia vestida de luto, cédeles el paso con respeto; debemos tener atenciones especiales con la vejez, la miseria, el amor maternal, la enfermedad, la fatiga y la muerte.”
“-¿Querrías-me dijo-aceptar estos dulces del payasito?Yo le indiqué que sí y tomé tres o cuatro.-Entonces-añadió-acepta también un beso.-Dame dos-respondí, y le ofrecí la cara. Él se limpió con la manga la cara enharinada, me rodeó el cuello con un brazo y me dio dos besos en las mejillas.”
“-Aquí tienes a este compañero de tu hijo, que no es solamente un buen muchacho,sino todo un gentil hombre.”
“Proponte cada día ser mejor y más amable que el día anterior. Di todas las mañanas:Hoy quiero hacer algo que pueda alabarme la conciencia y contente a mi padre, algo que aumente el aprecio de tal o cual compañero, el afecto del maestro, de mi hermano o de otros.”
“Entonces aquel rudo militar, que nunca había dicho una palabra suave a un subordinado suyo,le respondió con una voz dulce y cariñosa:-Yo no soy más que un simple capitán,tú, en cambio,eres un héroe.”
“Cuida de lo tuyo en vez de pensar en los demás, porque las cosas ligeras, si se descuidan pueden traer malas consecuencias.”
“Tras veintinueve años de reinado que él había ilustrado y dignificado con su valor,con su lealtad,con su sangre fría en los peligros, con la prudencia en los triunfos y la constancia en la adversidad.”
“Quiere a tu maestro, porque pertenece a la gran familia de cincuenta mil docentes primarios, esparcidos por toda la geografía de Italia, y que son como los padres intelectuales de los millones de chicos que crecen contigo, unos trabajadores no conceptuados merecidamente y mal pagados, que preparan para nuestra patria una generación mejor, más próspera y desarrollada que la presente.No me satisfará el cariño que me tienes si no lo profesas también a todos los que te hacen algún bien y entre ellos ha de ocupar el primer lugar tu maestro, después de tus padres. Quiérele como querrías a un hermano mío; quiérele cuando te complace y cuando te regaña, cuando a tu parecer, obra con injusticia y cuando creas que es injusto; quiérele cuando se muestre afable y de buen humor, pero más todavía cuando lo veas triste. Quiérele siempre. Pronuncia en todo momento con respeto el nombre de maestro que, después del de padre,es el más noble y dulce que un hombre puede dar a otro.”
“The school is a mother”
“It is not the dream of what you're feeling laziness, if not, the sleep of exhaustion.”
“What is working stain, does not soil.”