Poeta, abogado y político ecuatoriano. Fue uno de los personajes con mayor trascendencia y participación en la historia ecuatoriana. Su figura se hizo notable en la era independentista, en la integración bolivariana y en los inicios republicanos de Ecuador.
En la era colonial española, Olmedo se destacó como gran orador en las cortes de Cádiz, con el fin de lograr la abolición de las mitas. Estuvo prófugo un breve tiempo durante la Ley Absolutista promulgada por el rey Fernando VII. Volvió a su ciudad natal e inició, con otros patriotas, la preparación para la penetración guayaquileña, lo cual se desarrolló el 9 de octubre de 1820. Luego fue proclamado como Presidente de la Provincia Libre de Guayaquil, y prestó ayuda a Antonio José de Sucre para la emancipación de los restantes pueblos de la región. Protestó contra Simón Bolívar por anexar a Guayaquil, vía "manu militari", a la Gran Colombia; y en la posteridad luchó contra el régimen centralista de dicho país (Rebelión del Departamento de Guayaquil), impulsando la desintegración grancolombiana.