Sergi Llauger

“Sentado en aquel rompeolas, mi memoria invocó los orígenes que tanto me había costado desterrar al olvido. A eso me refería cuando decía que me asustaba volver a tener sentimientos. Éstos podían ser traicionero.”

“Es interesante escucharlo hablar. Sin miedo a equivocarme, diría que es un chico increíble. Su delicada naturaleza le hace parecer un monstruo a primera vista, pero sólo hace falta mirarlo a los ojos para saber que es diferente.”

“Me quede pensativo, como siempre incapaz de dormir eterno vigilante de la amenazadora noche.”

“Yo no estaba preparado para esto. Mi sensibilidad de cara a los demás era la misma que la de un semáforo.”

“Lo peor es que yo sabía que no tenía la culpa de nada, que todo había sido producto de un injusto malentendido y de una terrible casualidad.”

“Reconozco que ya sea por mi condición, o mi falta de sensibilidad, podría decirse que había perdido cierto tacto con la gente.. Quizás me había vuelto algo... impreciso.”

“Pero si una cosa voy aprendiendo a base de convivir en un mundo sin leyes es que absolutamente todo es posible..”

“Un régimen funerario resonó en mi cabeza mientras danzaba al compás de la propia muerte, fundiendome en un solo ser con aquella completa desconocida sin alma.”

“Imagino que al final, cuando la humanidad se extinga por completo, el último hombre que quede en pie será el encargado de apagar las luces de este mundo.”