“—No me lo pidas. No me pidas que me comporte como un Gabbana porque ahora no pienso hacerlo. No puedo hacerlo si ella es la moneda de cambio.”
“Porque a mí no habría podido salvarme. Si me tengo que salvar lo haré yo misma. Creo que puedo hacerlo.”
“¿Por que no me dijiste que era peligroso? ¿Por que no me lo advertiste? Las mujeres saben de lo que tienen que protegerse, porque leen novelas que les cuentan Como hacerlo...”
“-¿Y no le parece que también es importante lo que usted sienta?-me dijo-.¿No cree que siempre es mejor la más amarga de las verdades que la más dulce mentira?-me preguntó.-Sí, tiene usted razón -admití-, pero si la abandona ella terminará con su vida...-¿Entonces usted piensa que lo correcto es sacrificar la suya a cambio de la de ella?-me preguntó”
“Odio a un romano llamado Status Quo, me decía, llénate los ojos de asombro, vive como si fueras a morir en los próximos diez segundos. Observa el universo. Es más fantástico que cualquier sueño construido o pagado en una fábrica. No pidas garantías, ni pidas seguridad, nunca hubo un animal semejante.”
“No quiero ser esa persona, así que paso la mayor parte de mi tiempo en la escuela fingiendo y mintiendo. Se necesita un gran esfuerzo para fingir algo que no eres. No pienso en la música que me gusta, pienso en la música que debería gustarme. Cuando tuve una novia, traté de convencerla de que era el hombre que ella quería que fuera. Cuando estoy en una multitud, me quedo en la retaguardia hasta que pueda encontrar la manera de hacerlos reír. Por suerte, si hay una cosa que se me da bien, es fingir y mentir.”