“Cuando el mal gusto alcanza tales extremos, sólo queda el recurso de la risa”
“... uno siempre es más hermoso cuando hay un término para designarlo, cuando posee una palabra sólo para él. El lenguaje es menos práctico que la estética.”
“La magia deforma la realidad en interés de otro, con el fin de provocar una duda liberadora; la trampa, en cambio, deforma la realidad en detrimento de otro, con el objetivo de robarle su dinero.”
“... sería fácil ser Dios si el mal no existiera, pero entonces tampoco habría ninguna necesidad de Dios”
“¡No estamos en el teatro! Cuando se supone que se ha llegado al final, no basta con bajar el telón. Y si la obra es mala, pues bien la culpa es tuya.”
“Acababa de descubrir una verdad desoladora y, a la vez, cómica: la sensatez era el consuelo de los débiles”
“El error es como el alcohol: uno enseguida se da cuenta de que ha ido demasiado lejos, peor en lugar de tener la sensatez de detenerse para limitar las secuelas, una especie de rabia cuyo origen es ajeno a la ebriedad le obliga a continuar. Ese furor, por raro que pueda parecer, podría llamarse orgullo: orgullo de clamar que, pese a todo, hacíamos bien en beber y teníamos razón al equivocarnos. Persistir en el error o en el alcohol adquiere entonces, categoría de argumento, de desafío a la lógica”