“Ved cómo el odio y las luchas entre familias a nada conducen, más que al miedo, la locura y la muerte y cierto es que en muchos años que combatí junto a los míos contra nuestros eternos enemigos […], jamás vi nada bueno que lo justificase, porqué las rapiñas de unos con las rapiñas de otros se pagan, y los muertos de cada bando no tienen precio, sino que como una cadena van arrastrando nuevos muertos.”