“—¿Y por qué querías mantenerme a salvo antes de conocerme?—Porque desde el primer momento en que te vi supe que serías mi perdición.”
“...desde el primer momento en que te vi supe que serías mi perdición.”
“Por ti, Lena. Porque si mi alma es el precio que debo pagar para darte la posibilidad de encontrar la paz, acepto el trato sin vacilar. Nunca te haría daño si no creyese que de esa manera podría salvarte.”
“-Haces que merezca la pena que mi corazón continúe latiendo- Susurró contra mi cuello. Alcé la cabeza y lo miré a los ojos.-Y tú que el mío dejara de hacerlo.”
“La única razón por la que he sobrevivido en este mundo es porque debía encontrarte, y ahora que lo he hecho no pienso perderte.”
“Somos defectuosos, imperfectos y, aun así, orgullosos. Pensamos que las cosas van a ser para siempre. Que somos invencibles y que, por ello, lo que nos rodea también lo es. Y sin embargo, un buen día nos despertamos y descubrimos nuestro engaño, que el ayer duele y que el mañana ya no existe.”
“Si nos derrumbamos, Lena, nos volvemos vulnerables, y en este mundo, en el nuestro —recalcó—, la debilidad es un riesgo que no nos podemos permitir. Y la culpabilidad otro.”