“Yo siempre he amado el desierto. Uno puede sentarse sobre una duna de arena. No ve nada. No escucha nada. Y, sin embargo, siempre hay algo que brilla en el silencio.”
“Tienes una piedra en el corazón, y hay días en que pesa tanto que no se puede hacer nada.”
“-Siempre pensé en ti como el Liam de día, que era un idiota, imbécil, y un hombre prostituto, ligón. Luego estaba el Liam de noche, que era adorable, dulce y cariñoso. Siempre me ha gustado el Liam de noche.-Bueno, la noche era cuando me detenía de tratar de alejarme. Podía ser yo mismo y disfrutar de mi tiempo contigo. Para que lo sepas, sin embargo, ambas de mis personalidades te han amado por siempre.”
“Siempre hay algo de locura en el amor; pero también siempre hay algo de razón en la locura.”
“Oír el silencio, dondequiera que esté, es una forma fácil y directa de hacerse presente. Incluso si hay ruido, hay siempre silencio bajo y entre los sonidos.”
“No hay nadie en el mundo que atienda mejor que la pobretería en España el arte de no hacer nada y de vivir de nada; el clima del país contribuye con la mitad , el temperamento de las gentes aporta la otra mitad. Dad, en efecto, a un español la sombra en verano, el sol en invierno, un trozo de pan, ajos, aceite, garbanzos, una vieja capa y una guitarra, aunque no sea propia, los sones de la guitarra, ¡y que ruede el mundo como quiera! Hablarle de estreches! Para él no hay desgracia; la soportan sus hombros sin encogerse, lo mismo que cuando cuelga de ellos la raída capa. El español es siempre un hidalgo, aun en hambre y en harapos.”