“Nunca antes habia querido que nada durara para siempre y me pareció una gran novedad, una novedad que debería durar para siempre: querer que algo dure para siempre era mi forma de convertirme en un grande o en algo. Un grande es alguien que sabe que las cosas no duran y quiere que algunas - unas pocas, muy pocas- duren para siempre aunque, por definición sabe que no puede suceder. Un grande es un necio que quiere lo que sabe que no puede suceder- a diferencia de un chico, que cree que todo es posible y no tiene que pensar en esos sinsentidos y quiere cosas posibles porque todavía no aprendió que no lo son.”

Caparrós Martín

Explore This Quote Further

Quote by Caparrós Martín: “Nunca antes habia querido que nada durara para s… - Image 1

Similar quotes

“Mi padre era un hombre decente. O, por lo menos, eso que llamaríamos un hombre decente: alguien que, en las pequeñas circunstancias de la vida, prefiere no complicarse con las molestias de la indecencia. Uno que, por ejemplo, si al salir de la panadería desecubre que se lleva, además de las facturas, pebetes y miñones, un cuarto kilo de cuernitos sin pagar, vuelve al local, compone una sonrisa tímida, turbada - que le sale perfecta- e intenta un chiste malo para decirle a la dueña que ha vuelto porque es un hombre decente:-¡Vengo a denunciar un robo!Le dirá, por ejemplo, y que él es el delincuente que acaba de llevarse el cuarto de cuernitos sin previo abono de su precio estipulado. O sea: mi padre era un hombre cómodo, que nunca quiso tomarse el trabajo de ver qué haía un poco más allá de la decencia, de la conveniencia, de los buenos modales y las reglas morales. La decencia, en general, es cuestión de falta de imaginación o de pereza, y mi padre tenía, por lo que sé, bastante de las dos. Aunque, por supuesto, no sé qué habría pasado si alguna vez la tentación de la indecencia lo hubiera asaltado en serio, armada de una buena recompensa. Es fácil ser decente cuando te cuesta un cuarto de cuernitos; de allí en más se hace más y más difícil, hasta que llega al punto en que cada cual encuentra su temperatura de fundido. Si no hay metal que resista el calor pertinente, ¿por qué habría hombres o mujeres? Es - si existen tales cosas - una de esas verdades innegables; sabiéndolo, ¿no es preferible ahorrarse el fuego de decenas, cientos de grados celsius, y fundirse cin tanto despilfarro?”


“—No tienes derecho a decirme eso, Daniel. Tú no me conoces.—Dime que estoy equivocado y me iré. ¿Le quieres?Nos miramos un largo rato en silencio.—No lo sé —murmuró por fin—. No lo sé.—Alguien dijo una vez que en el momento en que te paras a pensar si quieres a alguien, ya has dejado de quererle para siempre —dije.”


“Son muchas las lecciones que da la muerte. A mí me ha enseñado un par de cosas que no se aprenden en los libros ni en los doctorados: que nada es para tanto y que siempre se puede escapar.”


“Hubo ya quien afirmo que todas las grandes verdades son absoultamente triviales y que tendremos que expresarlas de una manera nueva y, si es posible, pardojica, para que no caigan en el olvido, Quien dijo eso, Un aleman, un tan Schlegel”


“Pero si la realidad no es más que un conjuro, y no quieres realmente lo que crees que quieres... —Acerca su cara a mi cara y dice—: Si no tienes libre albedrío. No sabes qué sabes en realidad. Realmente no amas a quien solamente crees que amas. ¿Qué razones te quedan para vivir?”


“Es una mera ficción eso de que no existe un puente de unión entre una y otra gente, y que todos viven en la soledad y la incomprensión. Por lo contrario, lo que la gente tiene en común con los demás es algo más grande e importante de lo que cada ser humano tiene por naturaleza y lo que lo distingue de los demás.”