“Me abrumó la soledad que desprendía su persona y, a un tiempo, creí ver en su interior un abismo infinito al que no podía evitar asomarme.”

“En su año cuarenta y tres de vida, William Stoner aprendió lo que otros, mucho más jóvenes, habían aprendido antes que él: que la persona que uno ama al principio no es la persona que uno ama al final, y que el amor no es un fin sino un proceso a través del cual una persona intenta conocer a otra.”

“En un universo infinito hay infinitas copias. En algunas, su doble está leyendo ahora esta frase, a la par que usted. En otras, se la ha saltado, o siente que necesita tomar algo y ha dejado el libro. Y en otras ..., bien, no tiene un carácter muy agradable y es alguien al que usted no gustaría encontrar en un callejón oscuro”

“‎"La literatura es un arte que sabe profetizar aquel tiempo en que habrá enmudecido, [...] y enamorarse de la propia disolución y cortejar su fin.”

“Y hace tiempo que aprendí que un hombre que provoca celos a su esposa no vale la pena.”

“No podía evitar experimentar ese escalofrío que nos invade al llegar el amanecer, que es, a su modo, como un cambio de marea (...) cualquiera que alguna vez, al estar cansado y, por decirlo de algún modo, atado a su sitio haya experimentado ese cambio de atmósfera puede creerlo.”