“ー¿Te importaría si toco para ti ahora?ーSabes que amo escucharte tocar. ーEra verdad. Ella siempre amo escucharlo hablar de su violín, pensó que así entendía un poco mas de él. Ella podía escucharlo hablar apasionadamente por horas de breas, clavijas, desplazamientos, la posición de los dedos y de la tendencia de la cuerda La a romperse- sin sentirse aburrida.”
“Hay más en la vida que no morir, –dijo. –Mira la forma en que vives, Will. Brillas tanto como una estrella. Había estado tomando solo la droga necesaria para mantenerme con vida pero no suficiente como para mantenerme bien. Un poco más de ella antes de las batallas, tal vez, me da energía, sin embargo, una media vida, el gris crepúsculo de una vida. –¿Pero has cambiado tu dosis ahora? ¿Ha sido desde el compro- miso? –Demandó Will. –¿O es por Tessa? –No puedes culparla por esto. Fue mi decisión. Ella no sabe sobre esto. –Ella quiere que vivas, James.”
“— Jem es la mejor parte de mí. No espero que lo entiendas. Le debo esto. –Entonces, ¿qué soy yo? –preguntó Cecily. Will exhaló, demasiado irritado consigo mismo para comprobarlo. –Eres mi debilidad. –Y Tessa es tu corazón – dijo ella, no con enojo sino pensativamente. –No soy una tonta, como te dije – agregó por su expresión de sorpresa. –Sé que la amas.”
“¿No está enojado? –Estoy contento, –dijo. –Ellos van a ser capaces de cuidar uno del otro cuando yo me haya ido, o por lo menos puedo esperar eso. Él dice que ella no lo ama, pero seguramente ella llegara a amarlo con el tiempo. Will es fácil de amar y él le ha dado todo su corazón. Lo puedo ver. Espero que no se lo rompa.”
“Llegaste a mi vida y de repente tuve una verdad a la que aferrarme: que yo te amaba y tú me amabas.”
“Me siento responsable por ese muchacho. Si él nunca encuentra la felicidad, sentiré que le he fallado. Si no puede tener a la chica que ama, sentiré que le he fallado. Si no puedo conservar a su parabatai para él, sentiré que le he fallado.”