“¿Te has enamorado ya de la persona equivocada?Por desgracias, Señora del Refugio, mi único amor verdadero sigo siendo yo mismo.Dorothea rió estrepitosamente ante aquello.Al menos -dijo-, no tienes que preocuparte por el rechazo, Jace Wayland.No necesariamente. Me rechazo a mí mismo de vez en cuando solo para mantener el interés.”
“Lo único que te preocupa es que contraten a un instructor masculino y esté más bueno que tú.Jace enarcó las cejas.-¿Más bueno que yo?-Podría pasar -dijo Clary-. En teoría, ya sabes.-En teoría, el planeta podría partirse ahora mismo por la mitad, dejándome a mí de un lado y a ti del otro, separados trágicamente y para siempre, pero eso tampoco me preocupa. Hay cosas -dijo Jace. con su típica sonrisa torcida- que son demasiado improbables como para andar comiéndome la cabeza por ellas. [pp.80]”
“Hay más en la vida que no morir, –dijo. –Mira la forma en que vives, Will. Brillas tanto como una estrella. Había estado tomando solo la droga necesaria para mantenerme con vida pero no suficiente como para mantenerme bien. Un poco más de ella antes de las batallas, tal vez, me da energía, sin embargo, una media vida, el gris crepúsculo de una vida. –¿Pero has cambiado tu dosis ahora? ¿Ha sido desde el compro- miso? –Demandó Will. –¿O es por Tessa? –No puedes culparla por esto. Fue mi decisión. Ella no sabe sobre esto. –Ella quiere que vivas, James.”
“¿Qué? -preguntó de mala gana.-Ojalá dejaras de intentar desesperadamente atraer mi atención de este modo -dijo él-. Se ha vuelto embarazoso.-El sarcasmo es el último refugio de los que tienen la imaginación en bancarrota -le respondió ella.-No puedo evitarlo.Uso mi afilado ingenio para ocultar mi dolor interior. [pp. 185]”
“— Jem es la mejor parte de mí. No espero que lo entiendas. Le debo esto. –Entonces, ¿qué soy yo? –preguntó Cecily. Will exhaló, demasiado irritado consigo mismo para comprobarlo. –Eres mi debilidad. –Y Tessa es tu corazón – dijo ella, no con enojo sino pensativamente. –No soy una tonta, como te dije – agregó por su expresión de sorpresa. –Sé que la amas.”
“Conoces ese sentimiento, cuando estás leyendo un libro, y sabes que va a haber una tragedia; puedes sentir que viene el frío y la oscuridad, ver como se dibuja una red apretadamente al rededor de los personajes que viven y respiran en las páginas. Pero estas amarrado a la historia, como si estuvieras siendo arrastrado detrás de un carruaje y no puedes dejarlo ir o alterar el curso hacia algún lado.Siento ahora, como que está sucediendo lo mismo, solo que no con personajes de las páginas sino con mis queridos amigos y compañeros. No quiero quedarme sentada mientras la tragedia viene por nosotros. Lo haré a un lado, solo yo lucharé para descubrir la forma en que ha de hacerse.”
“Mi consciencia, –susurró Will. –Tú eres mi consciencia. Siempre lo has sido, James Carstairs. Haré esto por ti, pero primero voy a conseguir una promesa. –¿Qué clase de promesa? –Me pediste hace años que cese de buscar una cura para ti, –dijo Will. –Quiero que me liberes de esa promesa. Déjame mirar, al menos. Libérame para buscar. Jem miró con cierto asombro.–Justo cuando creo que te conozco perfectamente, me sorprendes de nuevo.”