“Hoy mi felicidad no dependía de lo que la gente pensara de mí”
“No me enorgullecía de mi soledad, pero dependía de ella. La oscuridad de la habitación era fortificante para mí como lo era la luz del sol para otros hombres.”
“Éste es el secreto de la felicidad: amar lo que uno tiene que hacer.[...] lograr que la gente ame su inevitable destino social.”
“Había sido atacada y casi asesinada, pero salí viva. Empecé a sentir que esto era algo por lo que estar orgullosa. Podía sostener mi cabeza bien alta, sabiendo que era una superviviente. Ni siquiera ese sicópata podría hacer una víctima de mí. Ahora dependía de mí no hacer una víctima de mí misma.”
“Y sin embargo, sentía la alienación de estar rodeada por otros que no podían verme realmente o que preferían no hacerlo. Había sentido odio hacia mí misma, provocado por la sensación de ser un fraude, de interpretar una imagen de lo que deseaba ser pero no era. Había vivido con el miedo a que la gente que quería pudiera alejarse de mí si alguna vez llegaba a conocer a la verdadera persona que se ocultaba en mi interior.”
“Quería que la gente confiara en mí, a pesar de todo lo que había oído. Y más que eso, quería que me conociesen. No lo que ellos pensaban que era, sino a la Hannah real. Quería que pasasen de los rumores. Que viesen más allá de las relaciones que tuve o que tenía, aunque no se fiasen de ellas. Y si quería que ellos confiasen en mí de ese modo, entonces tendría que hacer lo mismo por ellos, ¿no?”