“Cuando nos morimos, esas son las historias que siguen en nuestro labios. Las historias que solamente les contamos a desconocidos, en algún lugar íntimo de la celda acolchada de la medianoche. Esas historias importantes que nos pasamos años ensayando mentalmente pero que nunca contamos. Esas historias son fantasmas, que traen a la gente de vuelta de entre los muertos. Solamente un momento. De visita. Cada historia es un fantasma.”
“-. Todos nos contamos una historia sobre nosotros mismos. Siempre. Continuamente. Esa historia es la que nos convierte en lo que somos. Nos construimos a nosotros mismos a partir de esa historia.”
“La historia no es más que una sucesión de monstruos o de víctimas. O de testigos.”
“Es algo sabido que la vida no está predeterminada y que todas las historias son una cadena de casualidades. Pero incluso los que son conscientes de esa realidad, cuando llega cierto momento de su existencia y miran atrás, llegan a la conclusión de que lo que vivieron como casualidades no fueron sino hechos inevitables. ”
“De modo que esa es la diferencia entre contar una historia y estar dentro una historia: el miedo.”
“Tal vez eso es lo que nos llama a cada uno de nosotros, la promesa de la próxima historia, justo en el horizonte.O la historia patinando por la ventana del frente.O la que late en el interior de nuestros corazones, a la espera de ser puestas en libertad.”
“Quizá la más grande lección de la historia es que nadie aprendió las lecciones de la historia”