“Soy solo sensaciones. Esto es lo que me hace. Toma mi cuerpo y lo posee porcompleto, de manera que no puedo pensar más que en él. Su magia es poderosa,intoxicante. Soy una mariposa atrapada en su red, no puedo y no quiero escapar.Soy suya… totalmente suya.”
“Yo tengo la obligación de ser optimistaporque soy una militante política y quiero cambiar las cosas, y pienso que lo voy a poder hacer(...)Pienso que si no lo puedo cambiar me tengo que quedar en mi casa y dedicarme a otra cosa. Estoy en esto porque creo que las puedo cambiar.”
“Abre sus ojos de nuevo, su expresión es desolada–sincera. –¿No ibas a escapar? –pregunta.–¡No!Cierra sus ojos de nuevo y todo su cuerpo se relaja. Cuando abre sus ojos, puedo ver su dolor y angustia.–Pensé… –Se detiene–. Este soy yo, Ana. Todo yo… y soy todo tuyo. ¿Qué tengo que hacer para que te des cuenta de eso? Hacerte ver que te quiero de cualquier forma en que te pueda obtener. Que te amo.–También te amo, Christian, y verte así… –Me ahogo y mis lágrimas comienzan de nuevo–. Pensé que te había roto.–¿Roto? ¿A mí? Oh no, Ana. Justo lo contrario. –Se estira y toma mi mano–. Eres mi vida, –susurra, y besa mis nudillos antes de presionar mi palma contra la suya.”
“En la agenda escribí que era como estar muerta, pero ¿esto? Esto es peor. Tengo la sensación de morir cada día. Necesito sentir que estoy progresando. No puedo imaginarme continuando así mucho más tiempo. Sé que esta noche me dormiré y mañana me despertaré de nuevo sin saber nada, y pasado mañana, y al otro, todos los días de mi vida. No me lo puedo imaginar. No puedo afrontarlo. Esto no es vida, es solo una existencia, saltar de un momento al siguiente ignorando el pasado y sin planes para el futuro. Lo peor de todo es que ni siquiera sé qué no sé. Puede que haya muchas cosas esperando a hacerme daño. Cosas que ni siquiera soy capaz de imaginar.”
“Por más que lo intente no me puedo llenar con nada. Yo de verdad lo intento pero no sirve. No es por falta de ganas que no te quiero. Soy un vaso roto. Vacío y roto.”
“—¿Addy? —Hay un tono ronco en su voz y cierro mis ojos con él. Juro que puedo ver la profundidad de su alma.—¿Si?—Quiero que sepas algo. —Está bien.Él ladea su cabeza, me da un suave beso en los labios.—Solo quiero que sepas que eres mi sol, mi luna y mis estrellas. Mi cielo, mi infierno y mi tierra. Haría cualquier cosa por ti. Iría a cualquier sitio por ti. Si alguna vez me dejas, te seguiré.—Nunca tendrás que seguirme porque nunca te voy a dejar.El amor por él quema dentro de mí como una vela romana. Las llamas son vibrantes, ardientes, y el humo que despliega de la punta es sofocante. Y a pesar de que siento que no puedo respirar, si esta es la forma en que Damien me hace sentir, espero no volver a respirar.”