“La información se ha convertido, sobre todo, en una mercancía. Ya no tiene una función cívica. Aunque algunos todavía lo creamos, pero ¿no somos solamente un recuerdo? ¿Somos reales? ¿No somos acaso virtuales?”
“En un mundo pilotado cada vez más por empresas colosales que obedecen únicamente a la lógica comercial fijada por la Organización Mundial del Comercio (OMC), y en el que los gobiernos parecen un tanto desbordados por las mutaciones en marcha, ¿se puede estar seguro de que la democracia será preservada, proyectada? En semejante contexto de guerra mediática encarnizada, a la que se libran gigantes que pesan miles de millones de dólares, ¿cómo podrá sobrevivir una prensa independiente?”
“Serán necesarios largos años", escribe Václav Havel, "antes de que los valores que se apoyan en la verdad y la autenticidad morales se impongan y se lleven por delante al cinismo político; pero, al final, siempre acaban venciendo." Ésta debe ser también la paciente apuesta del verdadero periodismo.”
“La persona que se dice: me voy a informar seriamente viendo el telediario, se miente a sí misma. Porque no quiere reconocer que se deja llevar por su propia pereza.”
“Todo tiene sentido, pero yo me apagaré y nada importará. Efectivamente. No somos ni una anécdota. ¿Para qué preocuparse tanto? Mamíferos efímeros en un pedazo de piedra perdida en la inmensidad.”
“Nunca un caballero que se aprecie de serlo desaira a una dama en sus deseos aunque uno vea el engaño en sus ojos, pues todo hombre debe saber antes de comenzar a amar en la vida, que la sonrisa de una mujer hermosa es como una rosa en la punta de una daga.”
“Se me ocurre que, incluso aunque Zoya y yo aún seguimos vivos, mi vida ha concluido ya. No tardaré en perderla y no habrá razón para que continúe sin ella. Verán, es que somos una sola persona. Somos GeorgiZoya.”