“—¿Prefieres leer a jugar? —La señorita Elizabeth Bennet es una gran lectora y no encuentra placer en nada más.”
“No hay nada más engañoso que la apariencia de humildad. A menudo sólo es carencia de opinión, y a veces una ostención indirecta.”
“Sus modales eran refinados y su comportamiento ni excesivamente tímido ni afectadamente franco, con lo cual resultaba alegre, bonita y atractiva, sin llamar la atención de cuantos hombres la miraban y (mi parte favorita) sin hacer vehementes demostraciones de contrariedad o de placer cada vez que se presentaba la ocasión de manifestar cualquiera de estos sentimientos". Porque qué lindo es cuando una mujer no es sobreactuada.”
“Se puede hablar mal constantemente de una persona sin llegar a decir nada justo; pero no es posible reírse sin descanso de alguien sin dar de cuando en cuando con una observación ingeniosa.”
“I wonder who first discovered the efficacy of poetry in driving away love!- Elizabeth Bennet”
“No puedo soportar más en silencio. Debo hablar con usted por cualquier medio a mi alcance. Me desgarra usted el alma. Estoy entre la agonía y la esperanza. No me diga que es demasiado tarde, que tan preciosos sentimientos han desaparecido para siempre. Me ofrezco a usted nuevamente con un corazón que es aún más suyo que cuando casi lo destrozó hace ocho años y medio. No se atreva a decir que el hombre olvida más prontamente que la mujer, que su amor muere antes. No he amado a nadie más que a usted. Puedo haber sido injusto, débil y rencoroso, pero jamás inconsciente. Sólo por usted he venido a Bath; sólo por usted pienso y proyecto. ¿No se ha dado cuenta? ¿No ha interpretado mis deseos? No hubiera esperado estos diez días de haber podido leer sus sentimientos como debe usted haber leído los míos. Apenas puedo escribir. A cada instante escucho algo que me domina. Baja usted la voz, pero puedo percibir los tonos de esa voz cuando se pierde entre otras. ¡Buenísima, excelente criatura! No nos hace usted en verdad justicia. Crea que también hay verdadero afecto y constancia entre los hombres. Crea usted que estas dos cosas tienen todo el fervor de F. W.”
“Tengo la certeza, querida tía, de que nunca he estado muy enamorada, pues si realmente hubiera experimentado esa pasión pura y elevada, ahora detestaría hasta el nombre de semejante individuo y le desearía toda suerte de males. Pero no sólo abrigo sentimientos cordiales hacia él, sino que miro con imparcialidad a Miss King, y no la odio sino que, por el contrario, la considero buena muchacha. No puede haber amor en todo eso. Mi desvelo ha sido real; y aunque si estuviera frenéticamente enamorada de él resultaría ahora más interesante para todos sus conocidos, no puedo decir que lamento mi relativa insignificancia. A veces la importancia se paga demasiado cara, Kitty y Lidia son más sensibles que yo en lo que a asuntos del corazón se refiere; son jóvenes y todavía no están hechas a la mortificante convicción de que los hombres atractivos han de tener algún recurso para vivir, como todos los demás.”