“¡Pensar!—exclamé. ¿Qué necesidad tenéis derecordármelo, puesto que, piense o no piense, siempre estáis presente en mi alma?”
“¿Por qué no he de confesar mi angustia en este momento en que mi ser tiembla y fluctúa entre la vida y la muerte, en que el pasado se proyecta como un relámpago en el sombrío abismo del porvenir, en que todo lo que me rodea se desploma y en que el mundo parece acabarse conmigo? ¿No reconoces la voz de la criatura extenuada, desfallecida, que se hunde sin remedio, y a pesar de su inútil lucha, gritando con amargura...”
“¡Un ángel! ¡Bah! Todos dicen lo mismo de la que aman,¿no es verdad? Y, sin embargo, yo no podré decirte cuánperfecta es y por qué es perfecta; en resumen, haesclavizado todo mi ser.”
“El que por complacer a los demás, contra su gusto y sin necesidad, se fatiga corriendo tras la fortuna, los honores u otra cosa cualquiera, es siempre un loco.”
“¡Ay de mí! Este vacío, este horrible vacío que siente mi alma... Muchas veces me digo: “Si pudiera un momento, uno solo estrecharla contra mi corazón, todo este vacío se llenaría.”
“Desde qué ando todo el día entre la gente y veo lo que hacen y como se afanan, estoy mucho más contento de mi mismo”
“En esta vida son pocos los momentos que se resuelven con un sí o con un no.”