“No te quiero, no te quiero, pero puedes persuadirme.”
“Te quiero, sí, te quiero: pero a medida de que te quiero se me van haciendo innecesarias las palabras.”
“—Quiero que te quedes —Susurra en un tono amable—, pero no puedo tener todo lo que quiero”
“Te quiero de verdad Ian. …. Te quiero con toda mi alma.-Wanda”
“Te quiero…te adoro –dice–. Iré adonde digas: Estambul, Singapur, Honolulú. Pero ahora tengo que irme…se está haciendo tarde.”
“Ay, amor mío, no estoy triste, no, pero te quiero. Es un modo distinto de sufrir.”