“...a veces nos preguntamos por qué la felicidad tarda tanto en llegar, por qué no vino antes, pero si nos aparece de repente, como en este caso, cuando ya no la esperábamos, entonces lo más probable es que no sepamos qué hacer con ella, y la cuestión no es tanto elegir entre reír o llorar, es la secreta angustia de pensar que tal vez no consigamos estar a su altura”
“¿Por qué tan lejos de los dioses? Quizá por preguntarlo. ¿Y qué? El hombre es el animal que pregunta. El día en que verdaderamente sepamos preguntar, habrá diálogo. Por ahora las preguntas nos alejan vertiginosamente de las respuestas. ¿Qué epifanía podemos esperar si nos estamos ahogando en la más falsa de las libertades, la dialéctica judeocristiana? Nos hace falta un Novum Organum de verdad, hay que abrir de par en par todas las ventanas y tirar todo a la calle, pero sobre todo hay que tirar también la ventana, y nosotros con ella. Es la muerte, o salir volando. Hay que hacerlo, de alguna manera hay que hacerlo.”
“―No entiendo por qué hay expertos en esvis que se alistan como voluntarios para una Colonia Abierta. Tú no ignoras que la gente que estás estudiando va a ser explotada, y probablemente exterminada. Es algo que está en la naturaleza humana, y sabes que eso no puedes cambiarlo. ¿Por qué entonces vienes a observar qué pasa? ¿Masoquismo?―No sé qué es la "naturaleza humana". Quizá sea parte de esa naturaleza humana dejar descripciones de aquello que exterminamos. ¿Es tanto más agradable para un ecólogo, realmente?”
“la representación de la vida y de la muerte es infinitamente más desgarradora que la vida y la muerte mismas. Ello sucede porque las imágenes nos dan las cosas, pero nos las dan en tanto que perdida. Ahí radica la patética verdad de la imagen. La imagen está siempre por algo que fue, pero que ya no es.”
“Existe una opinión generalizada según la cual la matemática es la ciencia más difícil cuando en realidad es la más simple de todas. La causa de esta paradoja reside en el hecho de que, precisamente por su simplicidad, los razonamientos matemáticos equivocados quedan a la vista. En una compleja cuestión de política o arte, hay tantos factores en juego y tantos desconocidos e inaparentes, que es muy difícil distinguir lo verdadero de lo falso. El resultado es que cualquier tonto se cree en condiciones de discutir sobre política y arte -y en verdad lo hace- mientras que mira la matemática desde una respetuosa distancia.”
“¿Qué haré? Mas ¿para qué estudiolo que haré, si es evidenteque, por más que lo prevenga,que lo estudie y que lo piense,en llegando la ocasiónha de hacer lo que quisiereel dolor, porque ningunoimperio en sus penas tiene?”