“El momento presente no tiene más fundamento que su parentesco con el pasado.”
In this quote, Juan José Saer highlights the idea that the present moment is not disconnected from the past; rather, it is built upon and influenced by what has come before. By emphasizing the relationship between the present and the past, Saer suggests that history and tradition play a significant role in shaping our current experiences and circumstances. This quote serves as a reminder of the interconnectedness of time and the importance of understanding the past in order to make sense of the present.
The quote by Juan José Saer, "El momento presente no tiene más fundamento que su parentesco con el pasado," highlights the interconnectedness between the present moment and history. In today's fast-paced society, where people are constantly looking towards the future and striving for progress, it is important to remember that our actions and decisions are rooted in the experiences and lessons of the past. This quote serves as a reminder to honor and acknowledge our history in order to understand and shape our present.
The quote “El momento presente no tiene más fundamento que su parentesco con el pasado.” by Juan José Saer reminds us of the interconnectedness of time and how the present is influenced by the past.
Reflecting on the quote "El momento presente no tiene más fundamento que su parentesco con el pasado” (The present moment has no more foundation than its kinship with the past) by Juan José Saer, consider the following questions:
“La mañana entera, con su cuerpo incluso que la atraviesa desplazándose sobre las baldosas grises, y el yo impalpable y ubicuo que lleva adentro, desaparecen detrás de las imágenes que, ya casi definitivas, son, aunque vengan de la memoria, intemporales, y más indestructibles, podría decirse, que el aliento y la carne que las contienen.”
“Pero ellos los ignoran, menos por insensatez que por la concentración excesiva que les exige la marcha; y sobre todo porque, lo piensen con palabras o no, la calle recta que van dejando atrás, está hecha de ellos mismos, de sus vidas, es inconcebible sin ellos, sin sus vidas, y a medida que ellos se desplazan va formándose con ese desplazamiento, es el borde empírico del acaecer, ubicuo y móvil, que llevan consigo a donde quiera que vayan, la forma que asume el mundo cuando accede a la finitud, calle, mañana, color, materia y movimiento –todo esto, entendámonos bien para que quede claro, más o menos, y si se quiere, mientras sigue siendo la Misma, ¿no?, y en el Mismo, siempre, como decía, pero después de todo, y por encima de todo, ¡qué más da!”
“Por el modo de vestirse, cada uno hace de su cuerpo una ficción.”
“Que quede bien claro: el alma, como le dicen, es, pareciera, no cristalina sino pantanosa. Los motivos que la inducen, en esta cuadra, a dejarse llevar, como los llaman, al juego y a la exaltación, en la siguiente, con la misma arbitrariedad, y en forma no menos imprevisible, la sumen, para usar una vez más la expresión, en una intensa melancolía. En todo caso pareciera, ¿no?”
“Esos recuerdos no se presentan en forma de imágenes sino más bien como estremecimientos, como nudos sembrados en el cuerpo, como palpitaciones, como rumores inaudibles, como temblores”
“Tierra, cielo vacío, carne degradada y delirio, con el sol arriba, pasando, desdeñoso y periódico, por los siglos de los siglos: así se presentaba, ante mis ojos recién nacidos, esa mañana, la realidad.”