“Estoy destinada a morir virgen.—Mi propia confesión me sorprendió. ¿Esas palabras salieron de mi boca? Froté el suave material de la chaqueta de Noah. Tal vez debería haber ido con él. No para drogarme, pero para... bueno... no morir virgen.”

Katie McGarry

Explore This Quote Further

Quote by Katie McGarry: “Estoy destinada a morir virgen.—Mi propia confes… - Image 1

Similar quotes

“No espero nada. Esto no es horrible. Después de resolverlo, he ganado tranquilidad. Pero esa mujer me ha dado una esperanza. Debo temer las esperanzas. Tal vez toda esa higiene de no esperar sea un poco ridícula. No esperar de la vida, para no arriesgarla; darse por muerto, para no morir. Ya no estoy muerto: estoy enamorado.”


“El peor tipo de llanto no era el tipo que todos podían ver, los lamentos en las esquinas, el desgarro de la ropa. No, el peor tipo es cuando tu alma lloraba y no importa lo que hagas, no hay manera de consolarla. Una parte se marchita y se convierte en una cicatriz en la parte de tu alma que sobrevive. Para la gente como Echo y yo, nuestras almas contenían más tejido cicatrizante que vida misma.”


“Puede que crea que me lo merecía. Tal vez no debería haberle mandado una rosa a Juliet o haberla empapado de cerveza en la fiesta. Tal vez no debería de haber copiado a Lauren Lornet en el examen. Tal vez no debería de haberle dicho lo que le dije a Kent. O quizás pienses que me lo merecía porque había decidido acostarme con Rob, porque no iba a conservar la virginidad y esas cosas. Pero antes de que empieces a señalarme con el dedo, déjame hacerte una pregunta: ¿tan mala fui? ¿Tanto que merecía morir, morir así? Las cosas que hice, ¿fueron mucho peores que las que hace cualquiera? ¿De verdad fueron peores que las que haces tú? Piénsalo.”


“Ya he perdido un pedazo de mi mente. No puedo confiarle a usted lo que queda”


“Ella ya sólo existe en mis recuerdos. Se ha ido de mi lado. Estaba aquí, pero ha desaparecido. Y allí no hay término medio. Donde no hay lugar para el compromiso no puede haber un término medio. Los quizá tal vez existan al sur de la frontera. No al oeste del sol.”


“Sus hombros nunca se sacudieron. No había lágrimas corriendo por su rostro. El peor tipo de llanto no era el que todos podían ver, el llanto en las esquinas, el desgarro en la ropa. No. Lo peor sucedía cuando su alma lloraba y no importaba lo que hiciese, no había manera de consolarla.”