“-Ángel, confía en mí esta fue la cosa más caliente que me haya sucedido. Solo vos, me haces sentir diferente. Incluso besarte es diferente, es mil veces mejor que cualquier cosa que haya sentido antes. Haces que mi cuerpo queme en todas las partes en donde me tocas. No puedo explicarlo.”

Kirsty Moseley

Explore This Quote Further

Quote by Kirsty Moseley: “-Ángel, confía en mí esta fue la cosa más calien… - Image 1

Similar quotes

“Me dio un abrazo y puso sus labios en mi cuello, justo donde se unía con mi hombro y respiró profundamente por su nariz, enviado su aliento caliente a bajar por mi cuello. Esto es lo que hacía para calmarme cuando lloraba en su hombro; esta era la única cosa que parecía funcionar.”


“—Te llamo Ángel, porque, honestamente creo que Dios puso un ángel en la tierra sólo para mí —admitió—. La primera vez que te vi pensé que eras un ángel directamente del cielo. Eras tan hermosa que me dejaste sin aliento. Todavía lo haces, todos los días.”


“-Sólo quería dejar mis cosas. Un cambio de ropa y algunas cosas para mañana, dado que pasare la noche aquí.-¿Y no podías simplemente dármela en lugar de entrar aquí?-Pregunté con rabia. ¿Por qué tenia que hacer todo tan difícil?- Podía haberlo hecho, pero me habría perdido el placer de ver tu ardiente trasero en mi camiseta. Creo que es muy sexy que una chica vista ropa de su chico.”


“-¿Cuál es el problema, Ángel? -¡Ese imbécil se robó mi primer beso! -. Liam se echó a reír y me sentí aún peor.-¡No es gracioso, Liam! El primer beso de una chica es importante para ella. Sólo porque seas una clase de súper puta a la que no le importa, y probablemente no recuerda su primer beso, no significa que las pequeñas cosas no son importantes.-Ángel, cálmate. Él no te robó tu primer beso.”


“—Sí, él se limitó a darte un beso, pero ese no fue el primero. Tu primer beso lo obtuve hace mucho tiempo —explicó, con una media sonrisa que hizo que su rostro se viese hermoso. ¿De qué diablos estaba hablando? Nunca me había besado. Fruncí el ceño, pensando, tratando de recordar. —¿Recuerdas la vez que me hice daño cuándo me caí de ese árbol en mi jardín delantero? Tenía trece años y mi maldita pierna dolía tanto, y me preguntaste qué podías hacer para que el dolor desapareciese. —Cerró los ojos y negó con la cabeza al recuerdo, con una pequeña sonrisa en las comisuras de sus labios.”


“-No puedo cambiar mi pasado, Ángel, créeme que lo haría si pudiera. Nunca he sentido nada por nadie más, lo juro. Nunca le he dicho a nadie que era hermosa, sólo a ti. Nada más se compara a ti -dijo, mirándome intensamente, deseando que entendiera.- Buenas noches, Ángel -susurró.”