“—Así que, si me ayudas, es solo por temor a represalias. —Le doy la espalda, vuelvo a echarme en la cama, dispuesta a seguir durmiendo, y le resumo en una palabra lo que pienso de él—: Cabrón.”
“—No, no le dije una palabra de eso; de cualquier manera, no habría comprendido. Pienso que, si con la ayuda de la lógica se puede convencer a alguien de que no hay razón para llorar, dejará de llorar de inmediato. Está claro. ¿No le parece que estoy en lo cierto?—En ese caso, la vida sería demasiado fácil —replicó Raskolnikov.”
“...de que la realidad se le escapa y le deja en cambio una especie de parodia que él convierte en una esperanza.”
“No quiero ser esa persona, así que paso la mayor parte de mi tiempo en la escuela fingiendo y mintiendo. Se necesita un gran esfuerzo para fingir algo que no eres. No pienso en la música que me gusta, pienso en la música que debería gustarme. Cuando tuve una novia, traté de convencerla de que era el hombre que ella quería que fuera. Cuando estoy en una multitud, me quedo en la retaguardia hasta que pueda encontrar la manera de hacerlos reír. Por suerte, si hay una cosa que se me da bien, es fingir y mentir.”
“Quien sea que él es, yo le gusto. Es fácil de admitirlo ahora, en la oscuridad, después de todo lo que ocurrió. Él no es dulce o amable o algo en particular. Sin embargo, él es listo y desafiante, y a pesar de que él me salvó, me trata como si fuera fuerte. Esto es todo lo que necesito saber.”
“Sólo el individuo que vive en soledad es una criatura sujeta a leyes profundas y si sale al empezar la mañana, o mira hacia la tarde que está vibrante de vida y comprende lo que le rodea, entonces todo se desprende de él, como si de un cadáver se tratara, aunque siga en la plenitud de la vida.”