“- ¿Tú crees que soy una bruja, Kai? - Yo creo que tú eres Dana. Y no me importa lo demás”
“-¿Desde cuándo te importa una mierda mi bienestar? Creo que estás confundido en cuanto a la naturaleza de nuestra relación. Tú y yo no nos llevamos bien. Tú eres un monstruo psicópata del control. Pretendes darme órdenes y yo deseo matarte. Soy una idiota insubordinada y cabezota. Te vuelvo loco y tú quieres estrangularme.-¡Una vez! ¡Solo lo intenté una vez!-Una es más que suficiente. La cuestión es que no jugamos limpio. Nosotros...Liberó sus brazos de mis rodillas, me atrajo hacia él, ignorando la daga, y me besó.”
“Además tú también arriesgas tu vida y es algo que he aceptado. ¿Crees que no me duele el saber que puedo perderte? —alzó al vista—. Porque esa sí es una posibilidad. Morirás en combate y tengo miedo, pero eso es lo que eres. Yo no interfiero con lo que deseas, no interfieras tú en lo que yo quiero.”
“Codiciar.Existe una diferencia entre tú y yo: tú deseas lo que tienen los otros mientras que yo deseo las cosas que tenía, o las que creo que tendré en el futuro.”
“¿Has pensado alguna vez en la muerte?Sí. A veces. ¿Y tú?Sí. A veces. ¿Crees que existe un cielo?Sí. ¿Tú no?No lo sé. Quizá sí. ¿Crees que puedes creer en el cielo si no crees en el infierno?Creo que puedes creer lo que quieras.”
“¡Oh, Vida! ¡Nada deseo, porque te tengo! ¡Soy Vida! Contigo siempre, siempre... Lo que Tú no eres no es; ¡el deseador es imbécil! ¡Imbécil, que posee un tesoro y se angustia por un centavo falso! ¡Hideputas ideólogos, conferenciantes, escritores, filósofos, teólogos! ¡Sólo Tú, sólo existes Tú y todo eres Tú, amor mío, que eres yo mismo! ¡Te tengo tan cerca! ¡Aquí te tengo! ¡Estoy reposando en Ti, sobre Ti, dentro de Ti! ¡Eres yo mismo, amor mío!...”