“Quiero tener una opinión cuando todo esto termine. Quiero decidir. No quiero que el cáncer decida por mi. Mi cuerpo. Mi elección.”
“Él inclino su cabeza y habló suavemente —: Quiero estar contigo en estos malos momentos. Quiero llevarte a casa conmigo y tenderte en mi cama y tener horas y horas tu cuerpo envuelto en el mío y hacerte todo lo que o quiera. Quiero tenerte ahí en la mañana, así cuando despertemos puedo hacerte venir diciendo mi nombre. Quiero manejar hasta tu trabajo y recogerte cuando termines tu turno. Quiero ir a las tiendas contigo y comprar comida que podamos cocinar para la cena. Quiero ver un programa tonto de televisión y tenerte cayendo dormida en mi pecho, así podría verte y oír tu respiración.”
“Voy a hacer un rompeolascon mi alegria pequena. No quiero que sepa el mar que por mi pecho van penas.”
“Yo no quiero alcanzar la inmortalidad por mi obra. Quiero conseguirla por no morir. No quiero vivir en la memoria de mis compatriotas. Preferiría vivir en mi apartamento.”
“Y, por sí me olvido de todo, incluido el camino de regreso, quiero que sepas que sigo queriéndote con toda mi alma.”
“Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos, nos enseñó un escritor. Hay días, mucho de ellos, cuando resiento el tamaño de mi juego ilimitado. Quiero más numeros de los que puedo tener, y Dios, quiero mpas números para Augustus Waters que los que ha obtenido.Pero Gus, mi amor,no puedo decir cuando agradecida estoy por nuestro pequeño infinito. No lo cambiaría por el mundo entero. Me diste un por siempre con días enumerados, y estoy agradecida.”