“Aunque creo que ellos también están enfermos: enfermos de miedo, enfermos de egoísmo. ¿Cómo pueden hacer las cosas que hacen sin odiarse a sí mismos?”
“-[...] Lo que sí creo es que es importante conocer el pasado, sobre todo para nosotros: no debemos caer en los mismos errores. También para ellos, en algún momento tendrán que reconciliarse con lo que fueron.-Nosotros también formamos parte de ese pasado, aunque sea indeseable. Si las cosas no hubiesen sido como fueron, no estaríamos aquí.”
“Ese día entendí que habían sólo dos tipos de personas en este mundo – las personas que hacen lo que le dicen que HACER, y las personas que hacen las cosas para ellos. Sabia cual quería ser.”
“En todas las cosas humanas, cuando se examinan de cerca, se demuestra que no pueden apartarse los obstáculos sin que de ellos surjan otros.”
“Este es un homenaje a los locos. A los inadaptados. A los rebeldes. A los alborotadores. A las fichas redondas en los huecos cuadrados. A los que ven las cosas de forma diferente. A ellos no les gustan las reglas, y no sienten ningún respeto por el statu quo. Puedes citarlos, discrepar de ellos, glorificarlos o vilipendiarlos. Casi lo único que no puedes hacer es ignorarlos. Porque ellos cambian las cosas. Son los que hacen avanzar al género humano. Y aunque algunos los vean como a locos, nosotros vemos su genio. Porque las personas que están lo suficientemente locas como para pensar que pueden cambiar el mundo... son quienes lo cambian”
“— Ya no estas enfermo. Tú lo dijiste.Sin separar nuestros labios, tomó mis manos y las posicionó en su espalda, sujetando cariñosamente mis muñecas.—Claro que sí, estoy enfermo por ti. Siento que agonizo y la cura para mi mal son tus labios, ¿ves? —Inquirió mordiendo suavemente mi labio inferior, tirándolo con cuidado—, ya comienzo a sentirme mejor. Apuesto que mis mejillas están tan rosadas como las tuyas...”