“En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven.”
“En todas las cosas humanas, cuando se examinan de cerca, se demuestra que no pueden apartarse los obstáculos sin que de ellos surjan otros.”
“Todos los Estados bien gobernados y todos los príncipes inteligentes han tenido cuidado de no reducir a la nobleza a la desesperación, ni al pueblo al descontento.”
“Vale más hacer y arrepentirse, que no hacer y arrepentirse.”
“Al repudiar los ritos, el hombre se reduce a animal que copula y come.”
“¿Puedes vender cielo,el cielo azul a veces,o gris también a veces,una parcela de tu cielo,el que compraste, piensas tú, con los árboles]de tu huerto, como quien compra el techo con la casa?]¿Puedes venderme un dólarde cielo, dos kilómetrosde cielo, un trozo, el que tú piensas,de tu cielo?”