“Es que nacemos con dos ojos para ver y dos oídos para oír pero con una venda moral que nos impide sentir el dolor del prójimo, entendiendo por “prójimo” todo el que tenga un sistema nervioso para sentir y sufrir, así camine en cuatro patas. Unos pocos en el curso de sus vidas logran quitarsela venda pero la mayoría no, como nacieron se mueren, con el alma tapada, que es como vivieron y murieron Cristo y Mahoma, a cuyas religiones hoy pertenece más de la mitad del género humano: 3.400 millones.”