“Por primera vez en quizás nunca, cuando nos alejamos, no estamos locos. Uno no está acechando lejos de la otra. Nos alejamos por separado, pero juntos.”
“Nosotros no nos hemos separado por completo, pero aún no ha llegado el momento de que volvamos juntos a la carretera. Ahora está adquiriendo conocimientos en otro lugar. No tenemos más remedio que esperar.”
“Somos lo que queda de nosotros cuando nos rompen el corazón por primera vez”
“No es él marcando el ritmo y yo tratando de ponerme al día, o viceversa. Nos alejamos juntos, iguales.”
“...........La vida se metió por medio —dos años en el ejército, trabajo, matrimonio, responsabilidades familiares, necesidad de ganar cada vez más dinero, toda esa cagada que nos deja empantanados cuando no tenemos los cojones de luchar por lo que queremos—, pero nunca perdí el interés por los libros.”
“¿Por qué tan lejos de los dioses? Quizá por preguntarlo. ¿Y qué? El hombre es el animal que pregunta. El día en que verdaderamente sepamos preguntar, habrá diálogo. Por ahora las preguntas nos alejan vertiginosamente de las respuestas. ¿Qué epifanía podemos esperar si nos estamos ahogando en la más falsa de las libertades, la dialéctica judeocristiana? Nos hace falta un Novum Organum de verdad, hay que abrir de par en par todas las ventanas y tirar todo a la calle, pero sobre todo hay que tirar también la ventana, y nosotros con ella. Es la muerte, o salir volando. Hay que hacerlo, de alguna manera hay que hacerlo.”