“La mesa se interponía entre ellos. Tatiana pasó al otro lado.—Shura —dijo en voz baja—, por favor, deja que te toque.—No. —El capitán se apartó.Naira volvió a asomar la cabeza.—¿Está la cena preparada?—Casi, Naira Mijailovna. —Miró a Alexandr—. Dijiste que no te marcharías hasta arreglarme —señaló—. Arréglame, Shura.—Tú misma me dijiste que nada de lo que hiciera arreglaría lo que está mal dentrode ti. Bueno, me has convencido. ¿Dónde están mis cosas?—Shura...”

Paullina Simons

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“¿Es que no te acuerdas de lo que te dije en Berlín, cuando estábamos perdidos en el bosque, luchando para rebelarnos contra nuestro destino?—Sí —le contestó Tatiana, rodeándole el cuello con las manos, cerrando los ojos—. Dijiste que ya me habías dejado marchar una vez, que viviríamos juntos o moriríamos juntos.—Eso es —dijo Alexander—. Y esta vez, viviremos juntos.”


“Alexander, me has roto el corazón. Pero por haberme llevado a tu espalda, por tirar de mi trineo de muerte, por darme tu último pedazo de pan, por el cuerpo que te destrozaste pormí, por el hijo que me has dado, por los veintinueve días que vivimos en el paraíso,por todas nuestras arenas blancas de Naples y nuestros vinos de Napa, por todos losdías que has sido mi primer y mi último aliento, por Orbeli... Te perdonaré.”


“En el tapiz de la existencia de Alexander había un único hilo que no podría romperse con la muerte, el dolor, la distancia, el tiempo, la guerra o el comunismo. «No hay nada capaz de romperlo —susurró Tatiana. Y con su aliento, su cuerpo y sus labios, añadió—: Mientras yo esté en el mundo, mientras respire, tú perdurarás, soldado.»”


“No hagan con otros lo que hicieron con ustedes, no paguen con la misma moneda, el mal con el mal, que imponer la vida es el crimen máximo. Dejen tranquilo al que no existe, ni está pidiendo venir, en la paz de la nada.”


“Hay un momento, un instante en la eternidad. Antes de descubrir la verdad el uno sobre el otro. Ese simple momento es el que nos impulsa a través de la vida - cuando nos sentimos como si estamos en el borde de nuestro futuro, de pie sobre el abismo, antes de saber a ciencia cierta que amamos. Antes de saber a ciencia cierta que amamos para siempre.”


“Esto es lo que me pasó a mí. Pensé que tenía normas. Yo creía en mis absolutos. Lo hice para la mayoría de las situaciones. Entonces no lo hice. Conforme pasó el tiempo, mi mundo se volvió gris y mis absolutos se oscurecieron. El bien y el mal sedisolvieron en lo que sabía que tenía que hacer.”