“Ahora que tengo la ocasión,quiero que hablemos los dos: tú, de mí;yo, de ti, del corazón, !que sí!Que nunca es bueno el momentohasta que no hay otra opciónsiempre es el mismo cuento...este último momento.Hoy que tenemos la oportunidad-la tengamos o no-,nos callaremos los dos: tú, por mí;yo, por ti, por no enredar, !ya ves!¿por qué será que lo hacemos?Incluso, viendo llegarese último momento,cuando no queda tiempo, cuando no queda tiempo,para decir, siquiera:"te voy a echar de menos".Si vas a irte... vete, pero no te despidas;sal de noche, sal a oscuras,sal descalza y de puntillas, niña.Vete, vete y cierra la puerta,que no quiero verte salir de mi vida.No más plazos aplazables.Si ha de ser así..., adelante.Y mejor este momento, déjalopara algún otro instante.Acabemos cuanto antes,nadie tiene que arrastrarse,ese último momento, vívelo, y los demás,los demás, que aguanten.Y los demás, que aguanten.Ahora no tengo la ocasión-no la tengo, que no, que más da, ya pasó-,cuánto lamento que al finalno hablásemos ninguno de los dos,porque ahora nos sobra tiempopara pensar qué pasóese último momento, cuando no tuve tiempo -ni tú-,para escribirnos versos de cuando aquellos besos.Si estás oyendo, vuelve. Ni siquiera saludes;con la luz de la mañana,abre puertas a patadas, niña.Vuelve, que no hacen falta razones.Me muero por verte, volver a tenerte.No más dudas razonables,para mí no es comparable.Este último momento me robóel milagro de tenerte a cada instante.Acabemos cuanto antes,con un siglo habrá bastante.Este último momento es de los dosy los demás, que aguanten.No más dudas razonables,para mí no es comparable.Este último momento me doliópor culpa de un instante.Acabemos cuanto antes,con un siglo habrá bastante.Este último momento es de los dosy los demás, y los demás que aguanten.Y los demás...”