“–Así es. Porque ahora tengo mucho más que perder, y más cada vez que me besas. Pienso en perderte, y me duele. –”
“Cada vez que pienso en este camino de dolor y de alegría dentro de mí, sé bien, y con que arrebato, que la partida que juego es la más seria, la más exaltadora de todas.”
“La única razón por la que he sobrevivido en este mundo es porque debía encontrarte, y ahora que lo he hecho no pienso perderte.”
“Esto que hago ahora,es mejor,mucho mejor que cuanto hice en la vida, y el descanso que voy a lograr es mucho más agradable que cuanto conocí anteriormente”
“Además tú también arriesgas tu vida y es algo que he aceptado. ¿Crees que no me duele el saber que puedo perderte? —alzó al vista—. Porque esa sí es una posibilidad. Morirás en combate y tengo miedo, pero eso es lo que eres. Yo no interfiero con lo que deseas, no interfieras tú en lo que yo quiero.”
“Tal vez porque las promesas más importantes en nuestra vida son aquellas que nunca se pronuncian en alto, que no se gritan ni se declaran, que se formulan íntimamente, y que una vez cumplidas nos colman de una secreta y profunda felicidad mucho más auténtica y perdurable que cualquier otro tipo de gloria.”