“No se puede escapar a la muerte: al final siempre te alcanza.”
“Son muchas las lecciones que da la muerte. A mí me ha enseñado un par de cosas que no se aprenden en los libros ni en los doctorados: que nada es para tanto y que siempre se puede escapar.”
“Porque al final no siempre puedes elegir que conservar. Solo puedes elegir como lo dejas ir.”
“Supongo que la vida es la vida, te joda o no. Una cárcel. Y no te puedes escapar, por mucho que chilles o llores. En realidad no es tan malo como parece, es cuestión de ser plenamente ignorante, o al menos, fingir que lo eres.”
“No puedes pretender que quien te ama te trate a ti menos cruelmente de lo que se trata a sí mismo. La igualdad en el amor tiene siempre algo de horrible.”
“Como siempre, la consideración de su muerte lo serenaba tanto como lo turbaba la muerte de los demás. Tal vez porque, a fin de cuentas, su muerte era el final del mundo.”