“¿Nosotros? — le pregunté. Por supuesto. Yo no te dejare sola en esto, no importa lo que pase, tienes que saber que nunca te abandonaré.”
“Tranquila. Si quieres irte, no pasa nada. Todo el mundo quiere que te quedes. Y yo, más de lo que he deseado ninguna otra cosa en mi vida. Pero ése es mi deseo, y comprendo que quizá tú tengas tus motivos para querer otra cosa. Entenderé que decidas irte. No pasa nada si tienes que dejarnos y decides dejar de luchar. No te preocupes por nosotros.”
“—No quise decir lo que dije, Alex. Por supuesto que te necesito. No puedo creer que no lo sepas. Te necesito tanto que cuando no estás a mí alrededor, duele. En realidad duele, físicamente. Aquí. —Me toqué entre las costillas, donde podía sentir mi corazón martillando—. Sólo puedo hacer esto por ti. Sólo estoy aquí por ti.”
“-¿Quieres saber lo que significa tener hijos?-le dije mientras se sentaba-. Pues significa que a veces tienes que dejar que tu hija haga cosas que te parecen estúpidas, confiando en que, el hecho de que tú no seas capaz de hacerlas no quiere decir que ella tampoco. Que tal vez ella es lo suficientemente sensata como para salir del embrollo en que se ha metido.”
“Piensa en cuánto me quieres - había susurrado-. No te voy a pedir que me quieras siempre como ahora, pero sí te pido que lo recuerdes. Pase lo que pase, siempre quedará en mí algo de lo que soy esta noche”
“Tienes que usar esa terrible fuerza que tienes por alguien, por algo, por lo que sea que te haga mejor persona.”