“dudo que se imaginen nuestro plan, ya que ni nosotros mismos lo entendemos bien.”
“El se queda paralizado, aunque no se aparta, así que sigo acariciándole dulcemente el cabello. Es la primera vez que lo toco por voluntad propia desde la última arena.-Sigues intentando protegerme. ¿Real o no? -susurra.-Real -respondo; quizá deba explicarlo mejor-. Porque eso es lo que nosotros dos hacemos: nos protegemos el uno al otro. [pp.327]”
“Empiezo a recuperar la concentración cuando Caesar le pregunta si tiene una novia en casa.Peeta vacila y después sacude la cabeza, aunque no muy convencido.—¿Un chico guapo como tú? Tiene que haber una chica especial. Venga, ¿cómo se llama?—Bueno, hay una chica —responde él, suspirando—. Llevo enamorado de ella desde que tengo uso de razón, pero estoy seguro de que ella no sabía nada de mí hasta la cosecha.La multitud expresa su simpatía: comprenden lo que es un amor no correspondido.—¿Tiene otro?—No lo sé, aunque les gusta a muchos chicos.—Entonces te diré lo que tienes que hacer: gana y vuelve a casa. Así no podrá rechazarte, ¿eh? —lo anima Caesar.—Creo que no funcionaría. Ganar… no ayudará en mi caso.—¿Por qué no? —pregunta Caesar, perplejo.—Porque… —empieza a balbucear Peeta, ruborizándose—. Porque… ella esta aquí conmigo.”
“Fue la primera vez que lo vi sonreír; la sonrisa convertía al chico amenazador en alguien a quien te gustaría conocer...”
“Esos ojos verdes se fijan en un punto con tal intensidad que tratas de encontrar lo que ella ve.. perfección, es suficiente para mí.”
“Aprieto los ojos con fuerza e intento llegar a él a través cientos de kilómetros de distancia, enviarle mis pensamientos, hacerle saber que no está solo. Pero lo está, y yo no puedo ayudarlo. [pp. 17]”