“Si la cursilería fuera un pecado, yo cada noche me ganaría el infierno.”
“No se mucho de besos, pero yo le aseguro que los suyos no eran menos feroces que un enjambre de balas despedazando el aire”
“Mira, me duele aquí, entre el hígado, el corazón y el amor propio, ¿cómo no voy a pinche guacarear, si tengo putas náuseas en el alma?”
“Para valer la pena, una vida debe ser digna de contarse, me digo cada vez que me va mal, porque ya sé que los destinos torcidos se parecen a la rueda de la fortuna. No importa qué tan arriba o abajo estés, de todos modos vas a dar la vuelta.”
“Uno sabe que tiene madera de villano cuando descubre en cada límite ajeno un desafío propio.”
“Me voy a los extremos todo el tiempo. A veces te maldigo tanto que hasta rezo para que te vaya mal. “Virgen Santísima, que le amputen un brazo a ese Hijo de la Chingada”. Y otras estoy rezando para que me llames y me saques de aquí y nos vayamos a cualquier pinche nowhere a volvernos una feliz pareja de nobodies. Pero el resto del tiempo trato de no pensar en nada. más que en mí.”
“Nadie imagina todos los alaridos que se ocultan tras el silencio de los tímidos. Dejaríamos sordo al universo entero si nos lo propusiéramos.”