“—Quiero llevarte a cenar. A algún lugar agradable donde pueda continuar arrastrándome y mostrándote que puedes confiar en mí. Quiero que confíes en mí. Lo necesito. Te necesito más que nada. Todo tiene sentido cuando estás cerca. Todo es mejor. Ni siquiera podía cocinar la cena de anoche, porque no estabas allí. Tuve una pesadilla, y no hubo nadie que me despertase de ella. No es tu trabajo salvarme, pero... te quiero cerca. —Yo también.”